Ellos lo saben, siempre han sido uno de mis consentidos como buena adoradora de comida árabe e imagino que ya varias personas los conocen, les escribo sobre Pincho Pan, local ubicado pasando la Plaza Los Palos Grandes.
Los conozco desde que eran un local pequeñito en el que máximo entraban 6 mesas ajustadas y desde entonces es un lugar al que he regresado con frecuencia. Con el tiempo, el espacio se les hizo chiquito y ampliaron para beneficio de todos. Si me parece que uno queda medio hacinado y que la acústica dentro del lugar es algo mortal o es que el caraqueño es muy gritón, en fin.
Hace poco hice mi parada obligada en Pincho Pan, cuesta conseguir puesto si vas en carro pero el valet parking colabora para que uno no muera por inanición antes de llegar a la meta, las mesas se desocupan volando así que si se acercan y ven algo de cola en la puerta, no se asusten que se mueve rápido.
Atienden velozmente por lo que pedí mi comida favorita del lugar, el shawarma cuatro sabores, mejor conocido en los bajos fondos como "Cómete algo", suelo pedirlo cuando muero de hambre por lo que la foto que verán abajo no es la que le hace mayor justicia debido a la rapidez con la que la tomé.
A este delicioso ejemplar (como lo dice su envoltorio) no hay que pedir que le pongan "hasta mal de ojo" porque les aseguro que ya lo debe tener, tiene pollo, carne, falafel y kibbe, vegetales, papas fritas (dentro sí) y salsitas, viene acompañado de mi mayor adicción: salsa de ajo y aunque representa una sorpresa al ver lo robusto que luce, créanme que para una mujer hambrienta no es suficiente reto.
En este punto, no hay que preguntarme si regresaría, raro sería no seguir yendo. Sigan así.
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